«Me temo que ni usted ni yo podemos parar la marcha del tiempo” (Rauffenstein, La grande illusion) Insistimos en las rutinas. Repetimos los gestos cotidianos como quien reza a un dios en el que apenas cree. Colocamos viejos objetos queridos a la vista. Nos empeñamos en recordar, en no olvidar. Pero es en vano. Todo […]